Empezamos la Transpirenaica saliendo desde Llançà. Hoy por fin damos comienzo a este increíble viaje, por fin empezamos nuestra travesía del Mediterráneo al Cantábrico, del "Mar Medi Terraneum" (Mar en medio de las Tierras) al océano Atlántico, nuestro particular "Coast to Coast". Poco sabíamos ahí sobre lo que nos faltaba por recorrer, descubrir, sufrir y disfrutar hasta llegar al otro extremo pirenaico de España, poco sabíamos sobre nuestra propia Transpirenaica, en esta otra entrada hablo un poco en general de lo que significó este viaje para mí.
Inicio de la Transpirenaica, salida desde el Mediterráneo en Llançà. Canon G-12, f/ 5.0, 1/1600 seg. ISO 200. |
Este día directamente lo teníamos ya "sacrificado", no debería siquiera entrar en el cómputo general de la ruta pero aquí está. Cada uno de nosotros venía desde un punto de España. Reunirnos todos, juntar el material en la furgoneta, pequeñas compras pendientes, matizar detalles del equipo, el traslado a Llançà y comenzar la ruta nos llevó más tiempo del previsto. Comenzamos la ruta fuera de cualquier horario aceptable, comenzamos a las 16 horas, algo impensable en una jornada normal pero las ganas de empezar pudieron. Estábamos deseando comenzar a rodar.
Canon G-12, f/ 5.0, 1/1600 seg. ISO 200. |
Empezamos la ruta remojándonos en el Mediterráneo, en el puerto de la localidad de Llançà, donde se da inicio a la ruta. En la foto superior se puede ver a mi madre, que por proximidad de residencia se acercó a darnos la salida. En la inferior con mi hermano David saliendo ya de Llançà.
Saliendo de la localidad de Llançà. Canon G12 f/5, 1/400 seg. ISO 200 |
Nada más comenzar el cielo ya amenazaba tormenta, pero empujados por todos los días de preparativos y entreno que llevábamos a nuestras espaldas salimos como caballos desbocados, hasta llegar al primer collado, de simplemente 240 metros de desnivel, pero suficiente para frenar nuestro ritmo, pensando que si esto no era nada más que el primero de muchos días, más nos valdría llevar un ritmo más constante y conservador. En esta entrada hablo un poco del entrenamiento físico y mental, cuándo iniciar la ruta teniendo en cuenta el tiempo y cuidados en general que tuvimos presentes antes de abordar la travesía.
Tormenta sobre la Sierra de la Albera. Canon G12, f/5, 1/200 seg. 25 mm. ISO 100 |
Continuamos hacia la ermita de Sant Quirce de Cólera y pasamos por los pequeños pueblos de Rabós de Empordà y Espolla. Desde el camino de Vilartolí nos desviamos por la pista que sube al Castillo de Requesens, sin llegar a subirlo. En su descenso ya empiezan nuestras primeras incidencias del viaje: a Víctor en la bajada le revienta la cubierta de la cámara trasera, algo que no había visto nunca, una raja de unos 12 centímetros de largo, con lo que de poco sirvió la flamante cámara anti-pinchazos que llevaba puesta.
Reventón de cubierta y cámara. Canon G12 f/3, 1/100 seg. ISO 200 |
No llevábamos las cubiertas de repuesto encima. Pagamos así el salir como locos a "rodar" y tuvimos que apañarnos con lo que pudimos para salir del paso. Menos mal que imaginación y recursos por otras muchas andanzas no nos faltan. Lo "arreglamos" con bridas para minimizar la raja a modo de puntos de sutura, evitando de nuevo el contacto de la cámara con el firme permitiendo así rodar sin pinchar a los pocos metros.
Aquí estoy mostrando el "zurcido" de la cubierta de Víctor a base de bridas. Canon G12 f/3, 1/100 seg. ISO 200 |
Tampoco salimos con cámaras de repuesto, ya que al ser anti-pinchazos las que llevamos, nos fiamos...¡ERROR! Después de una raja en la cubierta de estas dimensiones no hay anti-pinchazos que aguante. Lo arreglamos anudando la parte del pinchazo de la cámara a la vieja usanza, dejando la pequeña raja en la lazada de fuera. He aquí una forma de arreglo de circunstancias efectivo de un pinchazo. Lógicamente no puedes repetirlo en la misma rueda, te quedas sin cámara.
Víctor mostrando su creación, tanto por su pinchazo como por la rudimentaria pero efectiva solución. Canon G12 f/3, 1/100 seg. ISO 200 |
Utilizamos una funda del móvil de plástico para cubrir y proteger la cámara colocada en el lugar donde quedaba expuesta por la raja de la cubierta. Dando una protección extra además de la unión de la cubierta por las bridas. Aprendimos la lección...otra vez!! Nunca te fíes. "Prepárate para lo peor, lo fácil ya está previsto"
Finalizando la reparación de la cubierta, rematando las bridas. Canon G12 f/3, 1/100, ISO 200. |
Finalmente el resultado es el que muestro abajo. Aguantó hasta el final de la ruta pero no habría aguantado mucho más. A partir de aquí empieza a llover y el día se torna gris plomizo, un buen comienzo para el viaje, por no decir que lo iniciamos un día 13...¿¿supersticioso yo??
Aspecto final de la reparación de circunstancias. Canon G12 f/4, 1/100 seg. ISO 200 |
Nos quedó acabar de disfrutar de la jornada por las estribaciones del macizo de la sierra de la Albera. Como se puede apreciar en la foto inferior además de los libros, cartografía, brújula y demás útiles de orientación, nuestra gran baza era el GPS acoplado en la bicicleta con la cartografía digital y la ruta marcada. Esto nos ahorró mucho, muchísimo tiempo e infinidad de quebraderos de cabeza ya que, amén del resto de etapas, en estas primeras precisamente que son relativamente llanas, además cuentan con innumerables cruces, los cuales unos siguen siendo caminos y otros son ahora carreteras. Hay glorietas donde habían cruces de camino y si a esto le sumamos el carecer prácticamente de puntos claros de referencia para la orientación, da como resultado una locura para la orientación topográfica.
GPS Magellan Triton 400, herramienta clave para finalizar con éxito la ruta. Canon G12 f/5, 1/200, ISO 200. |
Este día nos lo tomamos como un comodín para más adelante. Los kilómetros que hiciésemos hoy nos servirían de colchón ante futuras incidencias, lesiones o cansancio. Aún y así, el balance del día dejó bastante que desear: el cubrir 33 kilómetros nos supuso una cámara y cubierta inservibles y a nosotros y nuestro equipo empapados. La parte positiva es que es mejor sufrir esta incidencia en este primer día que cualquiera de los posteriores que tienen mucha más dificultad tanto física como técnica... Aún y con este balance tan pobre, nadie nos pudo quitar ese buen sabor de boca que deja el saber que estas empezando algo grande, ese mariposeo en el estómago con el que te metes en el saco a descansar para la próxima jornada...
Finalmente hicimos noche en la localidad de Cantallops, aprovechando unas obras para pernoctar cómodamente en su interior ya que, como por desgracia viene siendo habitual en España, estas se encontraban completamente paradas.
Continuación en otras entradas:
Transpirenaica I. Un sueño hecho realidad. Finalmente hicimos noche en la localidad de Cantallops, aprovechando unas obras para pernoctar cómodamente en su interior ya que, como por desgracia viene siendo habitual en España, estas se encontraban completamente paradas.
Continuación en otras entradas:
Transpirenaica II. Entrenamiento. Preparación mental. Cuando realizarla. Cuidados y prevención.
Transpirenaica III. Equipo básico, importancia del peso y la bicicleta.
Transpirenaica. Día 2. Cantallops - Montagut. 73 kms.
Transpirenaica. Día 3. Montagut - Ribes de Freser. 63 kms.